En esta época de calor, nada más refrescante que una sandía, pero, ¿tu perro puede comerla? Sí, ¡además es un snack seguro. Eso sí, hay algunas precauciones que debes tomar antes de compartir esta fruta con tu mejor amigo.
¿Tu perro puede comer sandía?
Sí, los perros pueden comer sandía, siempre que se ofrezca de manera adecuada. La pulpa roja y jugosa es segura y, además, contiene mucha agua, por lo que ayuda a mantener a tu mascota hidratada en los días más calurosos. Eso sí, no debe reemplazar su comida habitual, sino ser solo un pequeño premio ocasional.
Recuerda: todo bocadillo, incluida la sandía, debe representar como máximo el 10% de la ingesta calórica diaria de tu perro.

¿Qué parte de la sandía puede comer un perro?
Solo la pulpa. Es importante retirar todas las semillas y no darle la cáscara. Las semillas pueden provocar obstrucciones intestinales, y la cáscara es difícil de digerir, lo que podría causar malestar estomacal o incluso atragantamiento.
¿Cuánta sandía puede comer un perro?
La clave está en la moderación. Unos cuantos trozos pequeños (del tamaño de un dado) son suficientes. Ajusta el tamaño de las porciones según el tamaño de tu perro para evitar cualquier problema digestivo.
Si tienes un cachorro, consulta antes con tu veterinario, ya que su sistema digestivo es más sensible.
Beneficios de la sandía para perros
Ofrecida correctamente, la sandía puede ser un bocadillo saludable gracias a:
- Su alto contenido de agua (más del 90%), ideal para hidratarlos.
- Su bajo aporte calórico y de grasas.
- Su frescura, que puede ser aún mayor si la congelas en pequeños cubitos para un snack veraniego.
Precauciones importantes sobre la sandía
Aunque la sandía puede ser un buen premio, no todos los perros deberían comerla. Algunos perros con problemas de salud, como diabetes u obesidad, deben evitar frutas altas en azúcar natural. También, aunque es poco común, hay perros que pueden ser alérgicos a esta fruta.
Otro punto a considerar es que los productos saborizados a sandía, como dulces o jugos, no son aptos para mascotas. Suelen contener azúcares añadidos, edulcorantes peligrosos como el xilitol y otros ingredientes dañinos.
Cómo darle sandía a tu perro de forma segura
- Lava bien la sandía antes de cortarla.
- Retira todas las semillas.
- Quita la cáscara por completo.
- Corta en trocitos pequeños.
- Ofrécela como un premio ocasional, no como reemplazo de su alimentación diaria.
Si después de comer sandía notas síntomas como vómito, diarrea o cualquier comportamiento extraño, contacta de inmediato a tu veterinario. Toda esta información fue tomada de Purina.
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Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.