Si eres amante de los perros, seguramente siempre buscas maneras de compartir momentos con tu lomito, incluso en el transporte público. Sin embargo, dejar que tu peludo corra libremente en el metro puede ser una decisión peligrosa tanto para él como para las personas que están a su alrededor. Aunque la idea de darles libertad suena tentadora, hay varios riesgos que debes considerar antes de hacerlo.
Riesgos para tu perro
El metro no es un lugar diseñado para que los perros exploren libremente. Entre la multitud, las puertas automáticas y el ruido constante, tu mascota puede sentirse desorientada o asustada.
Un perro que corre libremente podría lastimarse con las escaleras eléctricas, resbalar en los andenes o incluso quedar atrapado en las puertas del vagón. Además, el metro es un espacio con superficies poco higiénicas que podrían poner en riesgo la salud de tu fiel amigo.
El doctor José Luis García, especialista en etología animal de la Universidad Nacional Autónoma de México, señala: “Los perros necesitan un ambiente controlado para sentirse seguros. Espacios como el metro pueden generarles niveles altos de estrés y ansiedad”.
Riesgos para los pasajeros
Dejar que tu peludo corra libre también puede ser un problema para los demás. Hay personas que pueden tener miedo a los perros o simplemente no sentirse cómodas con su presencia. Además, si el perro es muy juguetón o activo, podría causar accidentes al tropezar con alguien o al meterse en lugares donde no debería.
Un perro suelto también podría generar caos si comienza a ladrar o a intentar interactuar con otros animales o personas, lo que podría provocar molestias o conflictos.
Si necesitas transportar a tu compañero de cuatro patas en el metro, lo ideal es que utilices una correa corta y, si es necesario, un bozal. Esto no solo lo mantendrá seguro, sino que también garantizará la tranquilidad de los demás pasajeros. Otra opción es usar una transportadora, especialmente si tienes un perro pequeño o mediano. Estas medidas también te ayudarán a evitar multas, ya que muchas ciudades tienen regulaciones estrictas sobre cómo deben viajar los animales en el transporte público.
La doctora Ana María Sánchez, experta en bienestar animal de la Universidad de Guadalajara, recomienda: “Siempre es importante planificar el transporte de tu mascota considerando su comodidad y seguridad. Un simple paseo puede convertirse en un riesgo si no tomamos las precauciones necesarias”.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito