¿A los gatos les gusta o no que les acaricien la barriga? Depende del gato, pero la mayoría de estos preciosos mininos no disfrutan de que les acaricien la barriga. Hoy en Patas en Casa te decimos si a tu minino le gusta o no y los motivos.
¿A los gatos les gusta o no que les acaricien la barriga?
De acuerdo con Lena Provoost, experta en conducta animal de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Pensilvania, a los gatos no les gusta que les acaricien la barriga debido a que los folículos pilosos de la zona del vientre y de la cola son hipersensibles al tacto, así que las caricias pueden ser sobreestimulantes para ellos.
Lena Provoost afirma que «los gatos prefieren que los rasquen y los acaricien en la cabeza, específicamente debajo de la barbilla y las mejillas», donde tienen las glándulas odoríferas ya que el acto de frotarse la cara con otros felinos «permite que mezclen los olores, lo que en última instancia culmina en un “olor de colonia” para reconocer quién pertenece al grupo».
En general, los gatos no disfrutan de las caricias en la barriga, sobre todo si no se les familiariza con este comportamiento desde que es pequeño. No obstante no es imposible, solo hay que saber leer el lenguaje corporal de cada minino.
Otros motivos por los que no se deja agarrar la panza
En la vida felina salvaje, exponer el vientre significa ponerse en una posición vulnerable frente a los depredadores. Un estudio publicado en el Journal of Feline Medicine and Surgery encontró que incluso los gatos domésticos mantienen esos instintos de autopreservación.
Sharon Crowell-David, profesora de la Universidad de Georgia, advierte que “tocar el vientre puede desencadenar una respuesta de 'lucha o huida' en muchos gatos". Su investigación, publicada en el Journal of the American Veterinary Medical Association, demostró que el contacto no deseado en el área abdominal aumentaba los niveles de cortisol (hormona del estrés) en un 40% en gatos estudiados.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.