Las enfermedades articulares son comunes en los perros, especialmente a medida que envejecen. Aunque la artrosis y la artritis pueden parecer condiciones similares, presentan diferencias significativas en sus causas, síntomas y tratamientos.
Empecemos por la artrosis, que es una enfermedad degenerativa que afecta principalmente al cartílago articular.
“Es un proceso natural relacionado con el envejecimiento y el desgaste de las articulaciones", explica el veterinario James Cook, de la Universidad de Missouri. Los estudios publicados en el Journal of Veterinary Medicine indican que aproximadamente el 20% de los perros mayores de un año presentan algún grado de artrosis.
¿Qué es la artritis en perros?
La artritis es una condición inflamatoria que puede afectar a perros de cualquier edad. Sarah Caney, especialista en medicina veterinaria, señala que "la artritis es frecuentemente el resultado de una respuesta inmunológica que causa inflamación en las articulaciones". Una investigación publicada en Veterinary Research revela que la artritis reumatoide, una forma común de artritis, afecta al hasta un 3% de los perros.
Diferencias entre artritis y artrosis
El origen: La artrosis es degenerativa y está relacionada con el desgaste natural, mientras que la artritis tiene un componente inflamatorio que puede ser autoinmune o infeccioso.
Los síntomas:
En la artrosis, la rigidez y el dolor empeoran gradualmente y son más notables después del reposo o ejercicio. En la artritis, la inflamación es más evidente, las articulaciones están calientes al tacto y el dolor puede ser más agudo e impredecible.
La edad de aparición:
La artrosis es más común en perros seniors, mientras que la artritis puede presentarse a cualquier edad, incluso en cachorros.
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Tratamientos
La artrosis requiere un manejo a largo plazo centrado en mantener la movilidad y controlar el dolor, mientras que la artritis puede necesitar medicamentos específicos para controlar la respuesta inmune.
Afortunadamente un diagnóstico temprano puede mejorar la vida de tu mascota, pues ambas condiciones pueden manejarse efectivamente con el tratamiento apropiado.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
