Los michitos son unos de los animales más curiosos que podemos encontrar en nuestro canino de ser tutores de animales domésticos, poco a poco aprendemos junto con ellos que absolutamente todo les provoca una curiosidad infinita y que quieren explorar el mundo como si no hubiera un mañana, y aunque amaríamos dejarlos que sean felices, no es posible todo el tiempo porque pueden correr muchos riesgos.
Hoy en Patas en Casa te vamos a contar algunos de los principales motivos por lo que no deberías dejarlos salir de casa, en la medida de lo posible.
Los gatos pueden entrar en contacto con pulgas, garrapatas y otros parásitos
Mantener al gato dentro de casa es una excelente manera de impedir o, al menos, reducir considerablemente el riesgo de que sea infestado por pulgas, garrapatas y otros tipos de parásitos que se encuentran fácilmente en el mundo exterior, especialmente en parques, plazas y otras áreas arboladas, generalmente muy frecuentadas por otros animales. Algunos parásitos, inclusive, traen riesgos para los dueños, como la toxoplasmosis, una enfermedad que el gato puede contraer en la carne de hospederos intermediarios (como palomas y ratas) o en las heces de otros gatos ya infectados.
Los gatos pueden ser infectados con FIV o FELV
Además de los parásitos, otro riesgo para la salud de los gatos que salen de casa es entrar en contacto con enfermedades como FIV y FELV, respectivamente una versión del SIDA y la leucemia felina. Ambas enfermedades son causadas por virus, incurables y altamente transmisibles entre los gatos, ya sea por la saliva, sangre o orina. La mejor forma de prevención es mantener a tu mascota lejos de gatos desconocidos, ya que ellos pueden o no portar la enfermedad.
Las peleas con otros animales pueden causar lesiones graves e incluso infecciones
Los gatos domésticos tienen personalidades muy variadas, pero, en general, suelen ser muy territoriales. Dentro de casa, este comportamiento puede generar algunas peleas relativamente amistosas con otra mascota, pero, en la calle, interactuando con animales desconocidos, las consecuencias pueden ser mucho más graves. Los gatos pueden regresar a casa con arañazos serios, que pueden infectarse y hasta poner en riesgo la vida de la mascota.
Los gatos no acostumbrados al mundo exterior pueden ser atropellados
El concepto de cruzar en la línea peatonal, cuando la señal está en rojo, lamentablemente no es innato para todas las especies. Por eso, incluso los ágiles gatos pueden encontrarse en una situación inesperada en medio de la calle y, por ser animales pequeños, pueden ser atropellados, especialmente en vías transitadas o mal iluminadas. Además del peligro en las calles, los gatos pueden lastimarse en cercas y rejas.
Los gatos generalmente regresan a casa, pero pueden perderse en sus aventuras
Los gatos tienen un buen sentido de la orientación y, en general, logran regresar a casa, especialmente por ser animales que valoran el territorio seguro, con disponibilidad de alimento, agua fresca y afecto. Sin embargo, incluso estos eximios navegadores pueden llegar a perderse en sus aventuras, o incluso pueden ser “rescatados” por alguna alma caritativa. Por eso, especialmente si vives en una casa o un departamento en la planta baja, es importante que tu mascota use un collar con identificación, con tu información de contacto, para que puedan localizarte en caso de que el felino huya de casa.
Las personas pueden ofrecer riesgos a tu gato
Otras personas pueden ser un factor de riesgo para los gatos que salen de casa para explorar el mundo. Lamentablemente, algunos humanos no gustan de los animales y se sienten en el derecho de poner veneno mezclado con alimentos en sus casas, lo que puede intoxicar e incluso matar a tu felino. Para garantizar que tu gato esté protegido de estas personas malas, haz tu parte y deja a la mascota en casa, donde sabes que estará protegido y amado.