No me quiero separar de mi perro, pero poco a poco he tenido que entender que querer estar con él todos el tiempo y todos los días le hace daño, pues se ha vuelto dependiente de mí. Para evitar hacerlo sufrir, fui con mi veterinario, quien me dio una serie de consejos para bajarle el estrés a mi Chewie. Acá te los comparto:
1. Rutinas
Las rutinas nos ha ayudado a los dos. Para empezar, el tener que salir a trabajar me ha ayudado a no estar todo el día pendiente a mi perro. Adelantándome a lo que podría pasar con Chewie le enseñé poco a poco quedarse solo en casa, poniéndolo en la cama mientras yo me movía por la casa. Fue así que entendió que no necesita seguirme a todos lados para estar bien. Los expertos recomiendan comenzar con periodos cortos y aumentar gradualmente el tiempo de independencia.
2. Espacios seguros para él
Le creé una zona en mi casa donde se sintiera cómodo y seguro; ahí coloqué su cama y algunos juguetes. Ese lugar es su refugio. De acuerdo con los expertos, este espacio les ayuda a gestionar mejor su ansiedad por separación.
3. Cuidado con la atención inmediata
Yo era de las típicas que escuchaba que ladraba y corría a hacerle caso. Como con los humanos, esto no es tan bueno. No se trata de ignorarlo por completo, sino enseñarle que puede estar bien sin mí presente ni disponible todo el tiempo. Hazlo de manera gradual para que no se sienta rechazado.
4. Que conviva con otras personas y perros
El que empezara a pasear un instructor me ayudó a que se relajara y socializa con más gente. Cuando vienen amigas a mi casa, quiere jugar con ellas. Estos dos cambios han hecho de él un perro menos ansioso y dependiente.
5. No hacen de mis salidas un evento
Comportarme de forma tranquila y sin llenarlo de abrazos cada que salía ayudó a que entendiera que mis salidas y llegadas no son el fin del mundo.
¿Te ayudaron mis consejos?
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Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.