Si estás pensando en adoptar un Border Collie, tienes que saber que son los perros más inteligentes del mundo canino. Su mirada intensa, energía y habilidades asombrosas para el pastoreo, son algunas de sus cualidades. Pero, ¿qué los hace tan especiales?
La historia del Border Collie se originó en la región fronteriza entre Escocia e Inglaterra. Estos perros fueron desarrollados para el pastoreo de ovejas, pues tienen la capacidad de trabajar por horas en terrenos complicados. De hecho, el experto en comportamiento canino Stanley Coren, la inteligencia de los Border Collie está relacionada con su relación laboral, pues esta raza fue seleccionada para tomar decisiones rápidas y precisas, ideal para manejar a las ovejas.
Y todavía nos faltan características sobre los Border Collie. Por ejemplo, son una raza con una capacidad de aprendizaje y entrenamiento envidiable. De acuerdo con Coren, pueden aprender una nueva orden en menos de cinco repeticiones y obedecerla al primer intento el 95% de las veces. Esto supera por mucho a otras razas que necesitan hasta 20 repeticiones para aprender un nuevo truco.
La doctora Sophia Yin, especialista en comportamiento animal, asegura que esta raza no solo aprende rápido comandos básicos, también tareas complejas y trucos avanzados con facilidad. Son muy buenos para el pastoreo, pero también son excelentes compañeros para atrapar una pelota o un boomerang. Su capacidad para entender señales sutiles y trabajar de manera independiente los posiciona como perros versátiles y obedientes.
Uno de los ejemplos más famosos sobre esta raza es de Chaser, un Border Collie que conocía más de mil palabras. Este perro fue entrenado por el doctor John Piley. El can podía identificar juguetes por su nombre; entendía comandos complejos y podía categorizar objetos según su función y forma. Su capacidad cognitiva es tal, que se puede comparar con la de un niño pequeño.
Si estás considerando adoptar un Boder Collie toma en cuenta que necesitan mucho ejercicio físico y mental, pues son extremadamente activos. Necesitan un propósito y un trabajo que hacer. Sin la estimulación adecuada, se convierten en perros destructivos o pueden desarrollar problemas de comportamiento.
Es por ello que todos los días debes jugar con ellos, hasta entrenar y hacer ejercicios. Esto los mantendrá felices y saludables.