Contrario a lo que muchos creen, los perros no son los únicos que juegan con la pelota. Estudios recientes demuestran que los gatos no solo pueden aprender este juego, sino que obtienen importantes beneficios de él.
La doctora Carmen Rodríguez, etóloga especialista en felinos de la Universidad Complutense de Madrid, explica que el juego de atrapar pelotas "activa los mismos circuitos cerebrales que la caza en estado salvaje. Esto hace que sea una actividad naturalmente atractiva para los gatos".
Así cambia tu gato cuando juega con la pelota:
- 45% menos niveles de estrés
- 60% mayor actividad física diaria
- 30% mejor coordinación motriz
Beneficios de que tu gato juegue con la pelota
Miguel Ángel Pérez, veterinario especialista en medicina felina, destaca que el juego con pelotas proporciona "ejercicio físico y estimulación mental, dos elementos cruciales para la salud felina". Los beneficios documentados incluyen:
1. Ejercicio físico:
- Mantiene un peso saludable
- Fortalece los músculos
- Reduce el aburrimiento
- Previene comportamientos destructivos
- Mejora el vínculo con el humano
Así puedes jugar con tu gato a la pelota
1. Elección de la pelota adecuada
- Tamaño: más pequeña que una pelota de ping-pong
- Material: preferentemente con sonido suave
- Textura: que permita un agarre fácil
2. Técnicas de entrenamiento
- Comenzar con sesiones cortas de cinco a diez minutos.
- Recompensar cualquier interacción con la pelota
- Mantener un horario regular de juego
Consejos de expertos
Ana María Torres, conductista animal, sugiere que pruebes con diferentes tipos de pelotas para que tu gato no pierda el interés, incorporar premios y respetar cuando tu gato ya no quiere interactuar.
"Es fundamental entender que cada gato tiene su propio ritmo y preferencias", señala la Dra. Torres. "Algunos aprenderán rápidamente, mientras que otros necesitarán más tiempo y paciencia".
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Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.