Antes de ser tutora de gatos y buscar información sobre todas las etapas que atraviesan en su vida, para mí el embarazo felino era un misterio; podía durar un par de meses o más de lo que dura un embarazo humano. Siempre era un volado darme cuenta si mi gata estaba embarazada o solo estaba rellenita como efecto secundario de la esterilización que no sabíamos que tenía.
Hoy en Patas en Casa te vamos a contar cuánto dura el embarazo en gatos, cómo darte cuenta si tu gatita está embarazada y los conocimientos básicos que debes de saber sobre el embarazo felino.
¿Cuánto dura el embarazo en gatos?
El embarazo de una gata, suele ser de dos meses, de 63 a 65 días y a veces requerirá de cuidados especiales. Lo primero de lo que deben preocuparse los cuidadores es de la alimentación: al principio del embarazo, sentirá más hambre de lo normal, por lo que necesita alimentarse bien para que los gatitos crezcan sanos. Conviene consultar con el veterinario un alimento adecuado para cubrir todas las necesidades nutricionales que requiere el embarazo; el médico también puede recomendar el uso de algunas vitaminas.
A medida que los bebés gatitos se desarrollan, se empieza a comprimir el estómago de la gata. Como consecuencia, acaba comiendo menos porque su apetito se reduce. Durante este periodo, el veterinario puede recomendar cambiar ciertos elementos de su dieta como comida húmeda, verduras o vísceras. Recuerda que las gatas gestantes deben estar vacunadas de antemano y también haber recibido tratamiento antiparasitario y antipulgas idealmente antes del embarazo, si piensas hacerlo después de enterarse, primero consulta con un veterinario para asegurarte que no sea contraproducente.
¿Cómo saber si mi gata está embarazada?
Algunos signos que pueden ayudarte a identificar si tu gata está embarazada o no:
- Mamas rosadas y más grandes;
- Crecimiento de un pelaje fino alrededor de las mamas;
- El abdomen empieza a crecer alrededor de las cuatro semanas de gestación: primero aumenta en la zona de detrás de las costillas y luego en el resto del cuerpo;
- Agrandamiento de la vulva;
- Mayor necesidad de cariño;
- Necesidad de estar cerca de sus tutores;
La gata se vuelve más asustadiza con otros animales, al fin y al cabo, ya está empezando a desarrollar el instinto de proteger a sus gatitos.
Cuidados que debes tener con gatas embarazadas
Si sospechas que tu gatita está preñada o embarazada, puedes confirmarlo con una ecografía que se realiza a partir de la tercera semana. Otra forma de estar seguro de si tu gata está preñada o no, según la veterinaria, es con un test de hormonas placentarias, que es el menos común. A partir de los 45 días de gestación, también es posible realizar una radiografía.
En caso de los embarazos de las gatas primerizas, el entorno debe ser tranquilo y cómodo para la gatita, esto ayudará a que los productos sobrevivan a la gestación y la gata no los rechace después del alumbramiento. Después del alumbramiento recuerda que es necesario esterilizar a tu gata.
A medida que los bebés gatitos se desarrollan, se empieza a comprimir el estómago de la gata. Como consecuencia, acaba comiendo menos porque su apetito se reduce. Durante este periodo, el veterinario puede recomendar cambiar ciertos elementos de su dieta como comida húmeda, verduras o vísceras. Recuerda que las gatas gestantes deben estar vacunadas de antemano y también haber recibido tratamiento antiparasitario y antipulgas idealmente antes del embarazo, si piensas hacerlo después de enterarse, primero consulta con un veterinario para asegurarte que no sea contraproducente.
Cuántos gatos puede tener una gata embarazada primeriza
Una gata primeriza puede llegar a tener una camada de cachorros pequeña que va de 2 a 4 gatos. Cada parto de una gata ronda entre los cuatro a seis felinos, hay casos poco probables en los que pueden llegar a tener de diez a doce gatos por camada, aunque tienen poca probabilidad de sobrevivir; incluso algunos nacerán muertos. Recuerda que si tu gata ya ha parido con anterioridad, sus camadas pueden ir de 4 a 8 gatos.