¿Sabes por qué los gatos mueven la cola? La cola del gato es una parte muy curiosa del cuerpo de la mascota. Tiene varias funciones, entre las que se encuentra la comunicación. La cola, así como las orejas, la postura y la mirada, son mecanismos que nos posibilita comprender las emociones del animal sólo observando el lenguaje corporal felino. Cuando entendemos qué significa que el gato mueva la cola es más fácil saber cuáles son los mejores momentos para acercarnos al animal y cuándo es mejor mantener distancia, lo que ayuda a mejorar la relación entre tutor y mascota. ¿Quieres saber el significado del gato que mueve su cola? ¡Lee la nota a continuación!
¿Por qué los gatos mueven la cola?
Aunque parezca blanda, la cola del gato es, en verdad, una extensión de la columna vertebral. Eso significa que esta región de la anatomía del gato tiene huesos que pueden, inclusive, fracturarse en algún accidente al saltar de lugares altos, en una pelea de gatos o por el toque del tutor. Este riesgo de dejar al gato con la cola quebrada es uno de los motivos de por qué no es bueno tocar esta región, que inclusive lo pone muy molesto. Antes de entender qué significa que el gato mueva la cola, es importante saber cuáles son sus diversas funciones. La cola ayuda a mantener el equilibrio corporal del bichito y también lo auxilia en la flexibilidad. Además, la cola del gato tiene un papel fundamental en la comunicación. Puedes tener la seguridad absoluta de que cuando mueve la cola, en verdad, quiere decir algo.
Cuando el gato mueve la cola con movimientos largos es señal de curiosidad
El gato que mueve la cola puede presentar movimientos más largos o cortos. Los movimientos largos son los más espaciados y livianos como una pluma, como si el bichito estuviera saludando. En verdad, ese movimiento significa que está curioso. Algo a su alrededor despertó su curiosidad y está atento, observando el ambiente detenidamente antes de acercarse.
Que el gato mueva la cola con movimientos cortos y rápidos quiere decir que la mascota está animada
Cuando el gato mueve la cola con movimientos cortos y más rápidos, significa que está agitado y entusiasmado con algo. Normalmente, hace este movimiento cuando el tutor llega a casa, ofrece bocaditos o abre un saché para gatos o le da un juguete nuevo. O sea, las situaciones emocionantes hacen que los gatos muevan su cola de esta manera.
¿Por qué el gato mueve la cola cuando está relajado?
Un gato acostado que mueve la cola normalmente es señal de relajación. Probablemente está descansando nada más, sin ninguna preocupación. ¿Viste ese cariño en el gato? Este es el momento justo para acercarse y acariciarlo. ¿Pero por qué el gato mueve la cola cuando está relajado? Eso sucede porque, incluso en los momentos de descanso, el bichito está atento a todo a su alrededor. Por eso, no te preocupes, pues el gato acostado que mueve la cola realmente está relajado, pero se mantiene listo para actuar rápido si fuera necesario.
El gato acostado que mueve la cola mientras duerme significa que está soñando
¿Ya viste alguna vez a tu gato acostado, moviendo la cola mientras dormía? El movimiento es tierno, pero puede causar extrañeza y preocuparle al tutor, que empieza a pensar que el animal puede tener algún problema de sueño. Pero, en verdad, el motivo de por qué el gato mueve la cola al dormir es muy simple: ¡está soñando! ¡Sí, los gatos sueñan! y la colita que se mueve es una señal de que está soñando. No todos los animales presentan este comportamiento al soñar, pero cuando el gato acostado mueve la cola durante la siesta es muy probable que éste sea el motivo.
Cuando el gato mueve la cola en exceso es mejor mantener distancia
Cuando el gato mueve la cola sin parar, es importante estar atento e, incluso, mantener una cierta distancia. Este movimiento excesivo normalmente significa que el animal está muy ansioso e inquieto, además de malhumorado. Por eso, si ves al gato que mueve la cola de forma excesiva, déjalo en paz y mantente lejos sin molestarlo, pero siempre atento al comportamiento del animal. Si insistes, puedes recibir una mordida do gato o estresarlo más aún.
Redacción: Maria Luísa Pimenta