Una situación que ningún tutor quiere pasar es darse cuenta de que el gato desapareció. Las huidas pueden suceder por varios motivos, pero son más frecuentes en animales no castrados. Por instinto, van a la calle para marcar territorio y buscar una compañera para aparear. Por eso, cuando huye un gato que está castrado, los tutores suelen no entender el comportamiento.
Por otro lado, es inevitable preocuparse, principalmente, si no estamos seguros de que el gato volverá en algún momento. A continuación, aclaramos algunas dudas importantes sobre el gato castrado: cómo se comporta el animal después de la castración, los riesgos de la huida y cómo lidiar con un gato castrado agitado.
¿El gato castrado huye?
Puede suceder que un gato castrado huya, aún más si estaba habituado a escaparse de casa antes de la castración. En este caso, es algo que va a suceder porque forma parte de la rutina del animal, y no porque necesariamente va a salir corriendo atrás de un apareamiento o marcación de territorio.
Si es un bichito casero y que nunca tuvo este hábito, las posibilidades de tener que lidiar con la fuga del animal son pocas. El gato castrado huye sólo cuando ya está familiarizado con la calle — y, por supuesto, cuando tiene este “libre acceso” al lado de afuera.
¿El gato castrado vuelve después de huir?
Cuando el gato castrado sale a la calle es normal preocuparse, tanto por el estado de salud y bienestar de la mascota como por la posibilidad de que no vuelva más a casa. Aquí, es importante destacar que, la mayoría de las veces, el gato castrado huye y vuelve, si es algo que hace frecuentemente. La memoria olfativa es algo que contribuye mucho, de forma que el gato vuelve cuando huye porque se acuerda del camino a casa.
Sin embargo, es importante no apegarse mucho a eso. El gato cuando huye sabe volver, pero en la calle está susceptible a una serie de peligros, como peleas, atropellamientos e, incluso, corre riesgo de envenenamiento.
¿Cómo queda el gato después de castrado?
El comportamiento del gato después de la castración puede sufrir una serie de cambios. Como la cirugía de esterilización disminuye significativamente las hormonas sexuales de los animales, los gatitos tienden a estar más tranquilos. Además, deja de ser común que el gato marque territorio, esté muy agitado (en el caso de las hembras) o, incluso, quiera pelear con otros felinos. La mascota se vuelve menos agresiva y menos territorialista.
Los gatitos también están menos dispuestos y pueden, inclusive, caer en el sedentarismo, siendo importante estimular las actividades físicas de los bichitos para evitar la obesidad. Sabiendo cómo queda el gato después de castrado, es importante adoptar una ración para gatos castrados, que es menos calórica.
Entiende los riesgos de dejar que el gato castrado salga a la calle
Muchos tutores se quedan tranquilos con el hecho de que, casi siempre, el gato castrado vuelve a casa después de un tiempo cuando huye de casa. Sin embargo, esta simple actitud de dejar al animal andar por las calles puede ser muy arriesgada. Un gato envenenado, atropellado o con el riesgo de enfermarse son situaciones que suelen suceder y podrían ser fácilmente evitadas con la crianza indoor.
Lo más indicado es poner redes de protección en todas las ventanas de la casa, y también en las áreas que puedan dar acceso a la calle. Así, ¡garantizas la protección de tu amigo y evitas mayores preocupaciones en el futuro!