La sangre en la orina del gato nunca es una buena señal, sin embargo, puede significar varias cosas alarmantes incluso dependiendo de su color. Hoy en Patas en Casa te decimos las posibles razones por las que tu gato orine sangre.
¿Por qué mi gato orina sangre?
Problemas urinarios
La razón más frecuente por la que los gatos orinan sangre es una condición conocida como enfermedad del tracto urinario inferior felino, aunque también tiene otros nombres con los que se identifica como cistitis idiopática felina y síndrome urológico felino, pero básicamente son problemas urinarios.
No se sabe la razón exacta por la que los gatos se ven afectados por la enfermedad del tracto urinario inferior felino. Se cree que la causa es el estrés y la obesidad, ya que pueden desempeñar un papel importante para que se desarrolle dicha enfermedad. Las deficiencias en el "pegamento" de la pared de la vejiga, los virus y otros elementos biológicos son otras teorías.
Otros padecimientos muy específicos por los cuales tu gato puede orinar sangre
- Los cálculos de la vejiga también causarán sangre en la orina de gato. También puede ver los otros signos, como esforzarse y aullar al orinar.
- Infecciones del tracto urinario, que son poco comunes en gatos jóvenes y sanos. En los gatos mayores, las infecciones del tracto urinario se vuelven más comunes, especialmente en las hembras, debido a su anatomía.
- Cáncer de vejiga, que también es poco común. Los gatos con esta enfermedad pueden mostrar una variedad de síntomas, incluyendo sangre en la orina.
- En gatos muy jóvenes, las anomalías anatómicas de su tracto urinario a veces pueden provocar sangre en su orina.
¿Si mi gato orina sangre me debo preocupar?
La orina de gato debe ser de un color amarillo claro con un ligero olor a amoníaco. Si notas un color más amarillo-café es hasta cierto punto normal o tiene límites pasables. Si notas sangre roja brillante, con tonos rosados en la orina, decoloración naranja o decoloración marrón o si la orina parece ser espumosa o tiene coágulos de sangre, entonces es necesaria una visita al veterinario para investigar más a fondo la causa de estos cambios en el color y consistencia.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.