Los animales salvajes viven en la naturaleza sin necesidad de tener contacto con humanos, esto significa que están acostumbrados a vivir al aire libre, no en casas. Sin embargo, la apariencia de un cachorro salvaje no es muy diferente a la de un perro doméstico y esto ha sido el origen de muchas historias divertidísimas para algunos tutores y veterinarios.
Por eso, no es raro confundirlos, especialmente cuando son cachorros, como lo que le pasó a este hombre que encontró un cachorrito de un animal salvaje desconocido y que definitivamente los confundió con un perrito doméstico.
No era un perrito doméstico, era un cachorro salvaje
En TikTok, Felipe Molina cuenta la historia del cachorro salvaje que fue confundido con uno doméstico. Relata que, hace unos meses, rescataron a un perro abandonado al borde de la carretera. El animal, llamado Douglas, tenía la pata lastimada y lo llevaron al veterinario. Quien se encargó del perro fue João Dias, que con el tiempo se dio cuenta de que no se trataba de un perro doméstico. La verdad es que el animal era un cachorro de Graxaim, un tipo de perro salvaje común en Brasil.
Pese a que estas historias son graciosísimas y con finales felices, esta no tiene un final como tal, porque Douglas después de ser liberado en su hábitat natural, desde ese día el cachorro de Graxaim siempre vuelve a visitar a la familia que lo rescató. Aunque no esté domesticado, de alguna manera regresa de vez en cuando con quienes lo salvaron cuando estaba herido. Lo mejor de todo es que el Graxaim se lleva muy bien con João y con todos los otros animales que viven con él. La mayor prueba de esto son las fotos increíbles del Graxaim con su 'familia'.
¿Qué es un Graxaim?
El Graxaim es un tipo de perro salvaje que vive en América del Sur. Es muy parecido a un zorro y, por eso, a menudo puede confundirse con otros animales. Hay dos tipos de Graxaim que son comunes en Brasil: el Graxaim-do-Campo y el Graxaim-do-Mato. El Graxaim-do-Campo vive principalmente en el Pampa, el Cerrado y la Mata Atlántica. Tiene un pelaje marrón rojizo, manchas oscuras en la cola y toques grisáceos. Pesa hasta 8 kg y mide entre 86 y 100 cm. El Graxaim-do-Campo tiene orejas puntiagudas y es muy parecido a un zorro.
Por otro lado, el Graxaim-do-Mato (también conocido como Cachorro-do-Mato) es un poco más pequeño que el Graxaim-do-Campo. Pesa alrededor de 7 kg y mide entre 70 y 80 cm. Su cuerpo es más robusto y tiene un pelaje corto y grueso. El Graxaim-do-Mato tiene un pelaje marrón grisáceo, siendo la región del hocico más rojiza. Vive en casi todas partes de Brasil, excepto en la Amazonia.
¿Qué hacer si te encuentras un perro salvaje?
Si tú como Felipe Molina algún día te encuentras un cachorro de animal que no estás seguro de la especie a la que pertenece y tienes la espinita de que sea un animal salvaje, esto es lo que debes hacer. Ya sea un Graxaim, un Mabeco o cualquier otro perro de este tipo, debe ser devuelto a su lugar de origen. No importa si es tierno, tranquilo o incluso dócil: su hábitat debe ser respetado.
Varios tipos de perros salvajes están en peligro de extinción y privarlos de la naturaleza solo agrava el problema. Además, aunque sea un cachorro, el animal tiene sus instintos y no está destinado a ser domesticado. Por último, es importante destacar que mantener un perro salvaje en casa puede ser considerado un delito ambiental, ya que es como tener un animal silvestre en cautiverio.
Como consecuencia de ello, se confisca al animal y se castiga a quien cometa este acto. Por lo tanto, lo recomendado es siempre informar a los institutos de protección y resguardo animal correspondientes en tu país, si encuentras algún perro salvaje fuera del bosque, asegúrate de que esté fuera de peligro vital y déjalo libre para vivir en su hábitat natural.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de pensar adoptar o no un animal salvaje, recuerdo que en muchos países es ilegal.