Una buena noticia que se puede replicar en todo el mundo. España prohibe la compra de perros y gatos en tiendas, desde el pasado 29 de septiembre.
Pero, ¿entonces? ¿Qué harán para tener una mascota? Ahora solo podrán adoptar mediante criadores que estén registrados como tales. Esto de acuerdo con la Ley de Protección de los Derechos y el Bienestar de los Animales, cuyo objetivo es garantizar que los animales hayan sido criados en buenas condiciones y cuenten con las garantías sanitarias.
De acuerdo con la ley, cuando se compre un gato o perro, deben ser registrados en en Registro de Animales de Compañía en los primeros tres días. Adicional, las mascotas deben tener mínimo dos meses en el momento de la adquisición.
El director general de Derechos de los Animales, José Ramón Becerra, indica que están buscando la forma legal para que esta prohibición “sea lo menos lesiva posible para los establecimientos comerciales”, pero cumpliendo la normativa porque en ella se veta específicamente la intermediación. “Que puedan mantener alguna actividad de asesoramiento comercial o algo similar”, añadió en el diario El País.
Aunque suena bien esta ley, este cambio anula el canal de venta legal de las tiendas especializada, las cuales facilitaban todo al consumidor. Como algunos dueños señalan, no todo el mundo tiene la posibilidad de trasladarse a un centro de cría.
Si bien la ley “prohíbe la venta directa de cualquier tipo de animal de compañía a través de internet, portales web o cualquier otro medio digital”, los anuncios de animales en revistas, periódicos o similares también tendrán que incluir un registro de criador o el núcleo zoológico del establecimiento de venta.
Esta nueva reforma ayudará al control de animales, la adopción segura y la baja de abandono.
También te puede interesar: Estas son las razas que más ladran
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
