Tal como los humanos, los perros también tienen su humor y olor natural. Pero hay perros viejos que aunque los bañes, siguen desprendiendo un olor desagradable, ¿a qué se debe? Te lo explicamos.
¿Por qué huele mal aunque lo bañes?
- Problemas en la piel
Las infecciones cutáneas causadas por bacterias, hongos o parásitos son comunes en perros mayores. Condiciones como la dermatitis, la pioderma o la sarna pueden provocar mal olor y picazón. Si notas enrojecimiento, costras o irritación, consulta a tu veterinario.
Infección en los oídos
Los perros mayores, especialmente los de orejas caídas, pueden desarrollar infecciones por levaduras o bacterias. Si tu perro sacude mucho la cabeza o se rasca las orejas con frecuencia, revisa si hay enrojecimiento o secreción.Si tu perro se rasca mucho las orejas puede ser producto de una infección.
- Problemas dentales
El mal aliento en perros viejitos suele deberse a acumulación de sarro, gingivitis o infecciones bucales. Una higiene dental deficiente puede derivar en problemas graves. Considera cepillar sus dientes y ofrecerle juguetes dentales o una limpieza profesional.
Glándulas anales obstruidas
Si el mal olor es fuerte y proviene de la parte trasera de tu perro, es posible que sus glándulas anales estén llenas o infectadas. Los perros suelen arrastrar su trasero por el suelo o lamerse excesivamente cuando esto sucede.
¿Cómo evitar el mal olor en perros mayores?
Si bien algunas causas del mal olor requieren atención veterinaria, hay medidas que puedes tomar para ayudar a mantener fresco y limpio a tu perro:
- Baños adecuados: Usa un champú específico para perros con piel sensible y asegúrate de secarlo bien para evitar hongos.
- Cepillado frecuente: Elimina el pelo muerto y la suciedad para reducir olores desagradables.
- Limpieza de oídos: Usa soluciones especiales para evitar infecciones.
- Higiene dental: Cepilla sus dientes o usa productos dentales recomendados por el veterinario.
- Dieta equilibrada: Una alimentación de calidad ayuda a la salud general y a reducir olores corporales.
Si el mal olor persiste a pesar de estos cuidados, es fundamental que un veterinario evalúe a tu perro. Detectar y tratar cualquier problema a tiempo puede mejorar su calidad de vida y su bienestar.
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Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.