Los gatos pueden envenenarse con un buen de elementos que tenemos en casa, desde comida, limpiadores, insectos y agentes químicos que siempre se encuentran en cualquier rincón. Hoy te compartimos la lista de 10 cosas que tienes en casa y pueden envenenar a tu gato.
10 cosas que tienes en casa y pueden envenenar a tu gato
Para ser exactos, son 10 categorías de cosas distintas que tienes en tu jardín, cocina, almacén o cualquier rincón que pueden ser potencialmente mortales. Estos elementos son los más frecuentes que llegan a emergencias del hospital veterinario, eso de acuerdo con el Centro de Control de Envenenamiento Animal de la ASPCA que procesa más de 100.000 llamadas telefónicas sobre sustancias que son potencialmente venenosas para las mascotas domésticas.
- Medicamentos humanos: algunos calmantes para el resfriado, antidepresivos, suplementos dietéticos y analgésicos, sobre todo sustancias comúnmente utilizadas como la aspirina, el paracetamol y el ibuprofeno, son una causa común de intoxicación felina. Los gatos son propensos a tragar pastillas que se han dejado a la mano o que se han caído accidentalmente al suelo.
- Insecticidas: los gatos pueden ser envenenados por ciertos productos que fueron diseñados específicamente para perros como un medio para matar pulgas, garrapatas y otros insectos, sobre todo cuando no están diseñados para su especie o se les da en una cantidad desproporcionada.
- Comida humana: el consumo de uvas, cebollas, pasas, aguacates y chicle que contiene un edulcorante llamado xilitol, puede ser gravemente incapacitante para un gato. El chocolate, especialmente el chocolate de panadería, es particularmente peligroso, ya que contiene sustancias químicas que potencialmente pueden causar ritmos cardíacos anormales, temblores, depresión y convulsiones.
- Plantas de interior y exterior: los lirios, los tulipanes y el filodendro se encuentran entre cientos de plantas que se sabe que son venenosas para los gatos. Ingerir solo una pequeña hoja de algunas plantas ornamentales comunes, como las flores de pascua, podría ser suficiente para enfermar a un gato, y tragar una cantidad considerable podría resultar fatal. Los lirios son especialmente tóxicos para los gatos; pueden causar insuficiencia renal potencialmente mortal si se ingieren incluso en pequeñas cantidades.
- Medicamentos veterinarios: aunque se crearon para animales domésticos, preparaciones como los antiinflamatorios no esteroideos (AINE), los preventivos del gusano del corazón, los antibióticos y los suplementos nutricionales pueden ser tóxicos si se administran incorrectamente en dosis grandes.
- Antiplagas: sas sustancias diseñadas para envenenar ratones y ratas contienen ingredientes que también pueden ser atractivos para un gato. Dependiendo del tipo de rodenticida, la ingestión puede provocar condiciones potencialmente mortales como hemorragia interna, convulsiones y daño renal.
- Limpiadores domésticos: productos como la lejía, los detergentes y los desinfectantes pueden causar graves molestias gastrointestinales y respiratorias si son ingeridos por un gato.
- Metales pesados: el plomo, el zinc, el mercurio y otros metales pueden representar una amenaza grave si se ingieren o inhalan. El plomo es especialmente peligroso, ya que los gatos están expuestos a él a través de muchas fuentes, como astillas de pintura, linóleo y polvo producido cuando las superficies de las casas más antiguas se raspan o lijan. El zinc está presente en las monedas acuñados después de 1982 y la ingestión de incluso un solo centavo puede resultar en anemia potencialmente fatal e insuficiencia renal.
- Productos de jardinería: los fertilizantes, por ejemplo, pueden causar malestar gástrico grave y posible obstrucción gastrointestinal si se ingieren.
- Peligros químicos: productos como el anticongelante de etilenglicol, el disolvente de pintura y los productos químicos para piscinas pueden causar insuficiencia renal, malestar gastrointestinal, dificultades respiratorias o quemaduras químicas.
Si sospechas que tu gato ha estado en contacto directo con alguno de los elementos anteriores, no dudes en acudir a tu veterinario más cercano. El tiempo es elemental para atenderlo oportunamente.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.