Recupera la calma y tómate un par de minutos para leer esta información sobre el vómito de tu perro. Sabemos que como tutores, cualquier señal de peligro o de algo desconocido nos preocupa por el bienestar de nuestros perrunos, pero más vale estar informado antes de actuar, así que aquí te dejamos lo que hay que saber sobre el vómito amarillo en perros.
Ver vomitar a un perro es muy frecuente, a veces podría ser solo saliva, pero cuando observamos ciertas características como colores, sangre, coágulos o cuerpos extraños solemos alarmarnos bastante. Antes de alarmarte descarta alguno de los siguientes motivos.
Vómito amarillo en perros, posibles causas:
1. Síndrome de Vómito Bilioso
El síndrome de vómito bilioso (BVS, por sus siglas en inglés) a veces se utiliza para describir una condición en la que los perros vomitan bilis o espuma, pero no comida, después de no comer durante un tiempo. En la mayoría de los perros, esto ocurre temprano en la mañana después de no comer durante la noche.
Los perros con BVS pueden mostrar signos evidentes de náuseas, especialmente a primera hora de la mañana. Las náuseas en los perros a menudo se manifiestan como:
- Chasquido de labios
- Babeo
- Jadeo
- Reducción del interés en la comida
Aunque el BVS no suele ser una amenaza para la vida, habla con tu veterinario para descartar otras causas de vómito en tu mascota, ya que algunas pueden ser serias. El veterinario puede recomendar pruebas y tratamientos adecuados para tu perro. Si los diagnósticos estándar, como un análisis de sangre y un examen físico, sugieren BVS en lugar de algo más serio, tu veterinario puede recomendar ajustes dietéticos o medicamentos.
2. Enfermedades Gastrointestinales
Cuando un perro vomita bilis amarilla de manera aguda (inicio repentino) o crónica (continuamente con el tiempo), una multitud de problemas podría estar afectando el sistema digestivo, incluyendo:
- Enfermedades inflamatorias del intestino
- Úlceras
- Infecciones bacterianas o virales
- Infestaciones por parásitos
- Ciertos cánceres
En cada uno de estos casos, la condición subyacente necesita ser diagnosticada y tratada por un veterinario.
3. Pancreatitis
Los trastornos endocrinos como la pancreatitis pueden ocurrir después de que un perro ingiera alimentos altamente grasos o aceitosos. Pero el 90% de las veces, la causa desencadenante de la pancreatitis en los perros es idiopática, lo que significa que no se puede determinar.
Esta condición causa inflamación del páncreas, y a su vez vómito bilioso, junto con dolor abdominal intenso y diarrea. La pancreatitis generalmente ocurre de tres a cinco días después de que un perro come alimentos grasos, pero puede ocurrir tan pronto como 24 horas después.
4. Enfermedad de Addison
La enfermedad de Addison es otro trastorno endocrino, en particular un trastorno de las glándulas suprarrenales, que a menudo se caracteriza por vómitos. Con glándulas suprarrenales que no producen suficientes corticosteroides (hormonas del estrés), los perros con enfermedad de Addison pueden verse críticamente afectados por la mínima cantidad de estrés.
5. Obstrucciones Intestinales
El vómito regular puede volverse bilioso después de que el estómago de un perro se haya vaciado (aunque si tu perro está vomitando, es ideal abordar el problema antes de llegar a este punto). Junto con el vómito de bilis, una falta extrema de energía y un dolor abdominal severo pueden indicar una obstrucción intestinal.
6. Alergias
Si tu perro come algo a lo que es alérgico, puede ocurrir vómito y la bilis puede estar presente. A menudo, esto sucede cuando un perro cambia su dieta. Las alergias alimentarias comunes en los perros incluyen: res, lácteos, trigo, huevo, pollo, maíz, cordero, soya, cerdo, conejo o pescado.
En otros casos, un perro puede volverse alérgico a algo que ha comido regularmente durante años. La mayoría de las mascotas desarrollan alergias alimentarias entre los 1 y 5 años de edad.
En este caso, puede ser necesaria una prueba de dieta estricta de 12 semanas para identificar la proteína que causa la alergia. Un nutricionista veterinario también puede crear una dieta que elimine el alérgeno sin privar a tu perro de las vitaminas y nutrientes necesarios para funcionar a plena capacidad.
Causas menos alarmantes
- Cambio de dieta.
- Alergias alimentarias.
- Efectos secundarios de algún medicamento.
- Comió pasto en exceso.
- Golpe de calor o mareos.
Si el vómito amarillo de tu perro es ocasional, asegúrate de que tu perro esté bien hidratado, que no ingiera pasto o cantidades de comida muy grandes y menos en poco tiempo. Observa cada cuánto se pueden presentar y asegúrate de tener al corriente su esquema de vacunación, desparasítalo con frecuencia y consulta con tu veterinario, él te indicará el tratamiento a seguir.