Si últimamente tu lomito mayor ha empezado a llorar o aullar durante la noche, no estás solo. Muchos tutores de perros ancianos se enfrentan a este comportamiento y, aunque puede rompernos el corazón, es importante saber que no lo hacen por capricho: hay razones detrás, y también soluciones que pueden mejorar su descanso y calidad de vida.
¿Por qué lloran los perros mayores por las noches?
El llanto nocturno en perritos de edad avanzada puede tener múltiples causas. Una de las más comunes es el deterioro cognitivo. Así como los humanos pueden experimentar confusión o desorientación con la edad, los perros también pueden pasar por algo similar.

Purina señala que “los problemas neurológicos son frecuentes en los perros mayores y pueden incluir pérdida de memoria, confusión e incluso alteraciones del sueño, como el insomnio o los despertares frecuentes”.
Además de los cambios en el cerebro, hay otros factores que podrían estar afectando su descanso:
- Dolor físico: Problemas articulares, artritis o molestias musculares pueden volverse más intensas durante la noche, cuando están en reposo.
- Inseguridad o ansiedad: A medida que envejecen, algunos perros desarrollan miedos o se sienten más vulnerables, especialmente si su vista o audición ya no son las mismas.
- Necesidades fisiológicas: Es posible que necesiten salir al baño más seguido, o que no puedan aguantar tantas horas sin hacer pipí.
¿Cómo puedes ayudar a tu perro a descansar mejor?
Lo primero es observar si hay algún patrón en su comportamiento: ¿llora apenas apagas la luz?, ¿se calma si lo acompañas?, ¿parece buscar una posición para dormir pero no la encuentra? Esas pistas te ayudarán a entender qué está pasando.
Aquí van algunas soluciones sencillas y efectivas:
Revisa su cama: Asegúrate de que tenga una superficie cómoda, acolchada y cálida. Una cama ortopédica puede marcar una gran diferencia.
Establece una rutina nocturna: Paseos tranquilos antes de dormir, una cena ligera y un ambiente relajado ayudan a reducir el estrés.
Hazle compañía: A veces solo necesita saber que estás cerca. Puedes colocar su cama en tu habitación o dejar una prenda con tu olor cerca.
Consulta al veterinario: Si los llantos son frecuentes o vienen acompañados de otros síntomas (como pérdida de apetito o desorientación), es momento de una revisión.
La Asociación Americana de Medicina Veterinaria indica que “las revisiones frecuentes son clave en la etapa senior, ya que muchas enfermedades pueden ser tratadas o controladas si se detectan a tiempo”.
Tu perrito no está llorando por molestarte, sino porque algo necesita. Escucharlo es el primer paso para ayudarlo. Con paciencia, amor y algunos ajustes, puedes hacer que sus noches (y las tuyas) sean mucho más tranquilas. Porque él te ha acompañado toda la vida… y ahora te toca a ti cuidarlo con todo el corazón.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.