En las últimas semanas, Otto, un perro labrador negro de Córdoba, Argentina, ha capturado la atención de miles de personas en redes sociales por una habilidad poco común: va solo a comprar el pan para su dueño. Esta historia, compartida a través de videos en TikTok, ha causado revuelo y ha dejado a muchos asombrados por la inteligencia y lealtad del animal.
Todo comenzó cuando un usuario, al ver a un perro en la entrada de una panadería local con una bolsa en el hocico, decidió grabar la escena. Intrigado, le preguntó a los empleados del establecimiento qué hacía allí. Para su sorpresa, le explicaron que Otto es un cliente habitual que todos los días llega con una bolsa que contiene dinero y una nota escrita por su dueño con la orden de pan que debe llevar.
Con la bolsa en la boca y el papel que indica la cantidad exacta de pan, Otto ha conquistado a los vecinos y clientes de la panadería. Realiza esta tarea con tanta naturalidad que muchos transeúntes se detienen a observar cómo el labrador cumple su encargo sin la necesidad de supervisión humana.
Días después de que la historia se viralizara, apareció un segundo video en TikTok, donde el dueño de Otto, conocido como Don Polo, explicó cómo fue que le enseñó a su fiel compañero a realizar este curioso recado. Según Don Polo, Otto lleva tiempo ayudándolo de esta manera. “Empezamos poco a poco. Le ponía la bolsa en el hocico y caminábamos juntos hasta la panadería. Con el tiempo, él aprendió la ruta y entendió que debía regresar a casa con el pan”, comentó el hombre.
Para el dueño, Otto no solo es un perro inteligente, sino también un compañero excepcional. La tarea de ir por el pan se ha convertido en una rutina diaria que el labrador realiza con alegría, mostrando la fuerte conexión que existe entre ambos.
La capacidad de aprendizaje en los perros
La historia de Otto ha generado gran interés no solo entre los amantes de los animales, sino también entre expertos en comportamiento canino. La doctora Anna Kis, especialista en etología de la Universidad de Budapest, menciona que “los perros tienen una sorprendente capacidad para aprender conductas complejas a través de la repetición y la asociación positiva. Su vínculo con los humanos facilita el aprendizaje de tareas específicas que involucran seguimiento de instrucciones”.
Además, el caso de Otto demuestra cómo los perros pueden desarrollar habilidades de resolución de problemas y un nivel avanzado de obediencia, especialmente cuando se les enseña de manera gradual y con refuerzos positivos, como elogios y recompensas.
La historia de Otto ha conmovido a usuarios de todo el mundo, quienes han elogiado tanto la destreza del labrador como la relación tan especial que mantiene con Don Polo. Comentarios como “Otto es el perro más listo que he visto” y “Qué gran compañero tiene Don Polo” han inundado las publicaciones, mostrando cómo este pequeño acto cotidiano ha tocado los corazones de muchos.
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Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
