Los perros, gracias a su poderoso sentido del olfato, son capaces de detectar olores mucho más intensamente que los seres humanos. Según la doctora Alexandra Horowitz, profesora de Psicología Cognitiva en el Barnard College y autora de estudios sobre el comportamiento canino, "el sentido del olfato de los perros es entre 10,000 y 100,000 veces más sensible que el de los humanos". Esta capacidad les permite percibir una amplia gama de aromas, pero también significa que ciertos olores que podrían ser insignificantes para nosotros pueden resultar extremadamente molestos para ellos.
Olores cítricos
Uno de los olores más desagradables para los perros es el de los cítricos. Naranjas, limones, limas y pomelos producen una fragancia intensa que los perros prefieren evitar. Este rechazo puede deberse a los aceites esenciales presentes en estos frutos, los cuales resultan irritantes para su nariz tan sensible. De hecho, algunos productos repelentes para perros utilizan el aroma de cítricos como una forma natural de mantener a los canes alejados de ciertos lugares o muebles del hogar.
Productos de limpieza fuertes
Los productos de limpieza con aromas fuertes como el amoníaco, el cloro o el vinagre son también altamente desagradables para los perros. Aunque estos olores pueden resultar agradables o refrescantes para nosotros después de limpiar, para los perros pueden ser abrumadores e incluso tóxicos si son inhalados en grandes cantidades. La exposición constante a estos olores puede provocar estrés en el animal, lo que puede manifestarse en comportamientos como alejarse del área o frotarse la nariz contra el suelo para intentar deshacerse de los residuos de olor.
Perfumes y productos de higiene personal
Los perfumes y colonias con aromas intensos, especialmente aquellos con fragancias florales o dulces, pueden resultar extremadamente incómodos para los perros. La razón detrás de este rechazo radica en la alta concentración de compuestos químicos que contienen estos productos. Además, los aerosoles y desodorantes en spray pueden asustar a los perros no solo por su fuerte aroma, sino también por el ruido que generan al ser aplicados.
El doctor Stanley Coren, profesor emérito de Psicología en la Universidad de Columbia Británica, explica que "los perros utilizan su sentido del olfato para percibir el mundo que les rodea, y los olores artificiales como perfumes interfieren en su capacidad para reconocer y procesar olores familiares". Esto puede generar confusión y malestar en el perro.
Olores a especias
Las especias fuertes como la pimienta, el chile y el curry también son olores que los perros tienden a rechazar. Estos aromas contienen compuestos que pueden irritar las vías respiratorias de los perros, provocando que estornuden o se alejen rápidamente de la fuente del olor. En algunos casos, la exposición a estas especias puede causar molestias mayores, como irritación en los ojos o la nariz del animal.
Alcohol y productos derivados
El olor a alcohol es otro de los aromas que los perros no toleran. Las bebidas alcohólicas, así como los productos que contienen alcohol como desinfectantes de manos o ciertos tipos de perfumes, generan una reacción de repulsión inmediata en los perros. La razón es que el alcohol, además de tener un olor muy penetrante, puede resultar tóxico para los perros si se ingiere o inhala en grandes cantidades.
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.
