Las alergias en los perros no se manifiestas de la misma forma como en nosotros los humanos, sin embargo, podemos ser alérgicos a cosas muy similares. Hoy en Patas en Casa vamos a enlistar cuáles son las alergias alimentarias más comunes en los perros, para que pongas atención en el ambiente que rodea a tu perruno.
Cuáles son las alergias alimentarias más comunes en los perros
Las alergias alimentarias, también conocidas como reacciones alimentarias adversas cutáneas (CAFR), ocurren cuando el sistema inmunológico de tu perro ve los alimentos o ingredientes como un alérgeno. Hay una variedad de alimentos que se han implicado en alergias alimentarias en perros. Los culpables más comunes son carne de res, pollo, cordero y trigo.
Hay varios ingredientes que a menudo están relacionados con alergias/intolerancias alimentarias en los perros. Las proteínas son el ingrediente ofensivo más común. Las alergias o intolerancias comunes a los alimentos para perros incluyen:
- Pollo
- Ternera
- Lácteos
- Trigo
- Soja
- Huevos
Signos de una reacción alérgica en perros
Los síntomas de las alergias en los perros pueden variar dependiendo de la causa. Un perro que entra en shock anafiláctico, por ejemplo, tendrá una caída en la presión arterial seguida de shock, que es muy diferente de una reacción alérgica en la piel.
En general los siguientes síntomas podrían ser signos de una reacción alérgica
- Arqueadas
- Hinchazón de la cara, las orejas, los labios, los párpados o las orejeras
- Piel roja e inflamada
- Diarrea
- Vómitos
- Estornudos
- Picazón en los oídos
- Infecciones crónicas de oído
- Picazón, ojos llorosos
- Lamiendo constantemente
Algunos de estos síntomas también podrían ser un signo de otra condición, por lo cual es importante acudir al veterinario.
¿Qué son y para qué se usan los antihistamínicos?
Los antihistamínicos pueden ser usados para tratar alergias, tanto estacionales como ambientales, y reacciones alérgicas. Si tu perro sufre de picazón, enrojecimiento o hinchazón, los antihistamínicos pueden ayudar. Los antihistamínicos funcionan bloqueando los receptores de histamina. La histamina es una molécula que el cuerpo libera en respuesta a un alérgeno. Los antihistamínicos para perros se utilizan comúnmente para tratar reacciones alérgicas y ayudar en el tratamiento de alergias estacionales o ambientales. Cuando se usan correctamente, los antihistamínicos son una forma segura y efectiva de manejar las alergias de tu perro.
Los antihistamínicos no son milagrosos
Si tu perro tiene picazón o una reacción alérgica, puede que te preguntes si los antihistamínicos son la solución adecuada. Las alergias pueden ser un problema muy frustrante para los tutores y veterinarios, porque ningún tratamiento funciona de la misma forma para todos. Al igual que las alergias de cada mascota son un poco diferentes, las mascotas individuales también responden de manera diferente a cada tipo de antihistamínico. Desafortunadamente, esto implica un poco de prueba y error para determinar qué es lo que funcionará mejor para tu amigo peludo y mantener bajo control la picazón.
Cuándo no usar antihistamínicos en tu perro
Los antihistamínicos también deben ser usados con precaución en perros que tienen sensibilidades conocidas a los antihistamínicos o tienen enfermedades respiratorias como asma, enfermedad hepática y trastornos convulsivos.
Dicho lo anterior, es primordial que acudas con un veterinario para que te recomiende la mejor opción para tu peludo; deberás seguir las dosis indicadas, la frecuencia y los cuidados que te recomienden, y no te preocupes porque tenga que cambiar de antihistamínico, por fortuna no son caros y son bastante fáciles de conseguir. ¡Siempre acude con las y los veterinarios!
Recuerda que lo publicado en Patas en Casa no reemplaza la opinión de un profesional de la salud animal. Antes de incluir o excluir cualquier elemento de su rutina, acude a un especialista certificado para obtener una recomendación que se adapte a las necesidades específicas de tu perrito o gatito.