Siempre asociamos que el perro beba agua a una señal de buena salud. De hecho, es muy importante que los perros se hidraten correctamente a lo largo del día, pero cuando comienzan a beber más agua de lo normal es necesario estar atento. En verdad, siempre es importante observar el comportamiento y los hábitos de tu mascota para saber exactamente cuándo algo está fuera de lo normal. Un animal saludable necesita tener un equilibrio entre la cantidad de agua que bebe y la que libera en la orina. Esto depende de su tamaño y peso: un perro adulto debe ingerir entre 30 y 60 ml de agua por quilo del peso total, incluyendo lo que proviene de la alimentación.
Que el perro tome mucha agua puede ser resultado de alteraciones del clima o, incluso, un movimiento diferente en la rutina del animal, pero también puede indicar problemas más graves. La sed excesiva se llama polidipsia y, generalmente, se asocia al desequilibrio en el organismo y órganos del animal. Seguro que te darás cuenta cuando esto ocurra por lo que la mejor recomendación es llevar al perro al veterinario.
Mi perro bebe mucha agua: ¿cuándo es normal?
Naturalmente, los cachorritos beben una cantidad mayor de agua. Los perros grandes también necesitan ingerir más líquido diariamente para atender a las necesidades de su cuerpo. Esporádicamente, otras situaciones también pueden motivar al perro a beber mucha agua:
- Perras embarazadas o que están amamantando necesitan beber más agua en la vida diaria, esto explica la sed excesiva;
- Después de una caminata o actividad física, el perro va a ingerir una cantidad bien grande de agua. Esto lo ayuda a recuperar la temperatura normal del cuerpo;
- En días de más calor, el animal va a buscar el pote de agua con más frecuencia para mantenerse siempre hidratado.
Todo perro, sin importar su edad, necesita tener siempre agua fresca y filtrada a disposición. Lo ideal es abastecer su pote de agua por lo menos dos veces al día. Además, mantén el bebedero en un lugar limpio y aireado. Para ayudar a tu perrito a beber la cantidad de agua diaria recomendada, puedes desparramar más potes por la casa, ofrecerle alimentos húmedos e, incluso, prepararle hielos con jugo de frutas liberadas para perro. ¡Va a ponerse contento y va a estar hidratado al mismo tempo!
¿Cuándo indica un problema que el perro beba mucha agua?
Si tu perro no está pasando por ninguna de las situaciones mencionadas anteriormente y presenta una sed excesiva, es motivo para preocuparse - principalmente si la condición es repentina y está asociada a otros síntomas, como vómitos, diarrea, apatía o pérdida de apetito. En este caso, es esencial que lo lleves al veterinario para un check-up. Mira algunos problemas de salud cuyo síntoma es la polidipsia- y puede generar otra condición llamada poliuria, que es cuando aumenta la producción de orina:
- Diabetes mellitus: la deficiencia o resistencia a la insulina en el organismo del animal lleva a un cuadro de hiperglicemia. Este problema provoca el aumento de la cantidad de azúcar en el pis del perro. Es cuando ocurre la polidipsia compensatoria: el perro siente la necesidad de beber más agua para equilibrar la cantidad de líquidos en el organismo.
- Problemas renales: la insuficiencia renal y otros problemas en el órgano pueden provocar que tu perro tenga más sed. El tutor también va a observar alteraciones en el apetito, orina de coloración muy clara, aumento de pis y vómitos. Es necesario estar atento, pues el problema en los riñones suele ser silencioso y sólo da señales en estados más avanzados.
- Alteraciones en la producción del cortisol: cuando el cortisol, producido por las glándulas suprarrenales, está en una cantidad demasiado elevada o baja en el organismo del animal, puede producir enfermedades como hiperadrenocorticismo (mayor producción) e hipoadrenocorticismo (menor producción). La sed excesiva es uno de los síntomas.
- Insuficiencia hepática: así como las enfermedades renales, los problemas que desencadenan la insuficiencia hepática son asintomáticos al principio. Además de que el perro bebe mucha agua, el tutor también puede observar exceso de orina, pérdida de peso, vómitos y diarrea.
Redacción: Luana Lopes