Al ver a tus mascotas cuando interactúan entre ellas, ¿no sabes identificar cuando se trata de gatos que pelean de verdad o juegan que pelean? No siempre es fácil diferenciar. A veces, la pelea de gato parece un juego y, también, el juego puede parecer un poco bruto, incluso cuando es inofensivo. Para ayudarte a entender cuándo intervenir y cuándo dejar que ocurra, reunimos algunos consejos para responder a la pregunta "¿cómo saber si mis gatos juegan o pelean?", que en algún momento ya pasó por la cabeza de todos los tutores de felinos. ¡Fíjate!
¿Gato que juega o pelea? Una investigación intentó descifrar la socialización de los felinos
Diferenciar un juego de gatos de una pelea de gatos es un desafío incluso para los científicos - pero no por mucho tiempo. Una investigación publicada en 2023 en la revista Scientific Reports analizó vídeos de gatos de diferentes edades con el objetivo de encontrar patrones en las interacciones entre los felinos. La conclusión del estudio fue que existen tres categorías de socialización - amigable, combativa e intermedia - y que las interacciones pueden comenzar en una categoría y pasar a otra según se van desarrollando. Si observas dos gatos que un día se pelean y al otro, son afectuosos el uno con el otro, ¡que no te extrañe! Los investigadores también afirman que una interacción aislada, ya sea buena o mala, no determina cómo será la convivencia de las mascotas; la relación entre ellos puede cambiar día a día.
¿Pelea de gatos o juego? Reconoce las señales
Para quien tiene más de un gato en casa, es importante saber leer sus comportamientos para evitar que se lastimen. Cuando los gatos interactúan físicamente como si estuvieran luchando, pero sin emitir sonidos, probablemente es un juego, especialmente si son cachorros.
Pero cuando hay pausas largas en la interacción, muchos maullidos y persecuciones, puede ser que lo que empezó como un juego se haya transformado en conflicto. Otra observación importante es que, cuanto más recíproca sea la interacción sin que, de hecho, haya una competición, más probable es que los gatos estén jugando. Sin embargo, algunos pequeños desentendimientos de vez en cuando forman parte de la convivencia y no deben ser motivos de preocupación.
¿El gato pelea y después acaricia? Aprende cuándo intervenir
Si observas que los gatos son extraños entre sí y enseguida, se acarician y socializan, puede ser difícil entender si los gatos están jugando o peleando, y si se llevan bien o están desarrollando una aversión entre ellos. Según la investigación, para estar seguros de que se llevan bien y sólo tuvieron un momento de extrañeza, debes estar atento a señales de afecto como, por ejemplo, si los dos se refriegan con frecuencia, se lamen, duermen cerca uno del otro, comparten objetos y si se saludan con las orejas erectas.
Por otro lado, señales de que no se llevan tan bien y de que los conflictos pueden empeorar son, por ejemplo, si duermen cerca, pero sin contacto físico, si los momentos de cariño terminan en pelea, si no intercambian caricias o interacciones físicas recíprocas en el día a día. Si sientes que es momento de intervenir, un veterinario o un adiestrador pueden dar buenas orientaciones.